La característica principal de un taladro de columna (ver modelos aquí), es que resulta más preciso y eficaz al conseguir que la broca tenga una verticalidad perfecta para realizar el orificio y así ejercer presión uniforme.
Este tipo de taladro está compuesto por un cuerpo que tiene una palanca de penetración que digamos que es la que por presión que ejerceremos manualmente hace que avance la broca. En el cuerpo también están las velocidades y el porta broca.
La columna, que es el mecanismo que gradúa la profundidad y nos permite establecer qué medida usaremos para la profundidad del agujero que pretendemos hacer, digamos el límite de la perforación para que no traspase.
Dispone de una mesa de trabajo sobre la que se coloca todo lo necesario, además facilita el giro, inclinación y elevación que debemos aplicar sobre el eje.
Para usarla sólo debemos ponerle broca, ajustar la mesa de trabajo para la colocación apropiada y presionar para que el taladro resuelva su función. Normalmente tiene 4 cambios de velocidad, siendo que a mayor diámetro de la broca menos velocidad pondremos.
Hay que llevar gafas o máscara protectora especialmente cuando taladremos metal ya que las virutas que salten serán peligrosas.